¡NO HAY NADIE MEJOR QUE YO…soy todo un hombre!

Muchas veces somos como una fuerte barrera. Una “Muralla China” es como podríamos definirlo. Pasaron ya un par de años que escuché una frase que marcó mi vida notablemente aunque, es de admitirlo, proviene de la industria del modelaje. “Cuando vas caminando por la pasarela modelando un hermoso vestido, ropa interior de lo más sexy o harapos que no van ni siquiera con tu tono de piel lo único que debe de estar en tu mente es 'No hay nadie mejor que yo'

Me llamó mucho la atención escuchar este pensamiento porque, vamos aceptémoslo, los hombres pensamos así… y no necesariamente somos Cristiano Ronaldo en un “photoshooting” para Emporio Armani. Simple y sencillamente somos los mejores en todo, siempre tenemos la razón en todo lo que hacemos y decimos, nunca habrá alguien que tenga mejor conocimiento de lo que hacemos más que nosotros… en otras palabras ¡No hay nadie mejor que nosotros!.

¡Muy interesante! ¿Qué sucede cuando en verdad sí hay alguien mejor que nosotros en lo que sea que estemos haciendo?

Sucede que los hombres operamos de manera muy distinta a las mujeres. El señor “pene”, como suelo llamarlo en ocasiones como estas, juega un papel ¡wow! tan importante en la vida de un hombre que, en definitiva, somos NADA sin él. Sí señores, el tamaño importa y prometo tratar el asunto en mis futuras publicaciones, posiblemente cambie un par de paradigmas. Sin embargo, ¡gracias a Dios!, los hombres no caminamos por las calles presentando a toda la multitud y vulgo a nuestro acompañante; en casa… las cosas pueden ser un poco… diferentes.

¿En verdad soy más hombre si solamente yo tengo la razón? Es de esperarse que esta respuesta sea afirmativa para muchos de nosotros y, aunque sea un arduo trabajo admitirlo, (me incluyo) esto no es cierto. Yo mismo soy de las personas que creen siempre tener la razón inclusive en campos de conocimiento enemigos.

Mi edad puede ser muy baja y mi sabiduría poco extensa, pero en verdad es molesto un comportamiento de esta índole en un hombre que se considere “hombre” e inclusive “caballero”. En nuestro pequeño mundo, y no me refiero a nuestra cabeza, el conocimiento es algo que nos hará triunfar como personas, pero una persona dispuesta a triunfar sabe escuchar y discernir entre lo que sabemos esta correcto y lo que simplemente no. Por otra parte, escuchar segundas opiniones nunca está de más.

Es mucho mejor quedar ante una chica, ante una sociedad, ante otro hombre como una persona respetuosa y educada (aspectos de todo un caballero) escuchando a los demás y no haciendo alarde de nuestro conocimiento como todo un perfecto patán. Aceptar nuestros errores y aprender de ellos nos hace ver como el chico bueno de la película, además es de recordar “We girls flirt with the bad guy, but in the end is the good guy who we stay with” (nosotras las chicas coqueteamos con el chico malo, pero al final es con el chico bueno con quien nos quedamos). ADMÍTELO… alguna vez lo pensaste.